La abadía de Northanger - Jane Austen

Título original: Northanger Abbey

Autora: Jane Austen

Editorial: Alba Editorial

ISBN: 9788484285939

Páginas: 287

Precio: 12 €

Sinopsis:

Catherine Morland es una muchacha «tan corriente como la que más»: ni por espíritu ni por condición social está llamada a ser una heroína novelesca… y, sin embargo, las novelas son su debilidad. A los diecisiete años, tiende a ver la vida como una ficción perfectamente capaz de enredarla en sus marañas. Así, invitada por unos amigos, es presentada en sociedad en Bath y conoce a un joven apuesto y refinado, como en una novela sentimental. Luego, invitada por el padre del joven, pasa una temporada en una antigua abadía, donde sospecha que se cobijan terribles secretos, como en una novela gótica. Pero la realidad, que también tiene sus secretos, le revelará al fin un mundo acaso más absurdo y angustioso que el imaginado por la peor de sus fantasías.

Opinión personal:

Ya dije en las reseñas de Orgullo y Prejuicio y Sentido y Sensibilidad que tengo en mente leer todas las novelas de esta autora, porque adoro la forma en la que cuenta sus historias. En esta ocasión escogí La abadía de Northanger porque me llamó la atención la sinopsis, aunque pronto surgieron voces señalando que este era uno de sus libros más flojos, y que, quizás, debería haberlo dejado para el final. Todavía no he leído suficientes libros de Austen como para confirmar o desmentir dicha opinión, pero es cierto que los dos libros anteriores contenían  diálogos que me parecieron  absolutamente geniales, mientras que en esta ocasión los encontré mucho menos incisivos. 

En algunos aspectos es patente que en esta novela Austen todavía no ha alcanzado la madurez como escritora, lo que no significa que no apunte maneras, pues La abadía de Northanger también tiene cosas que ofrecer. La burla que  hace la autora a la moda de la época de leer novelas góticas  presentándonos a una protagonista fantasiosa y llena de frescura que interpreta la realidad como si fuese la heroína de una de estas  novelas, me ha resultado divertida. Algunos de los personajes secundarios tampoco tienen desperdicio: la señora Allen con su carencia de criterio propio, el señor Thorpe, insoportable y odioso y, como no, Isabella, cuya actitud es exactamente igual a la de algunas personas que nos rodean en nuestra vida diaria. Hay que ver, épocas tan distintas y patrones exactamente iguales...

La trama, en ocasiones, también se ralentiza. Sin embargo, en esos momentos carentes de acontecimientos relevantes uno puede deleitarse con la representación de la forma de vida de la época. Además, me han encantado todas y cada una de las veces que Austen se dirige al lector, burlándose de las convenciones sociales a las que debe someter a su heroína, o haciendo simples reflexiones, y copio una de ellas:

«Reconozco que constituye un hecho nuevo en la novela, y que es terriblemente impropio de la dignidad de una heroína; pero si fuese igual de insólito en la vida ordinaria, el mérito de una imaginación fantástica me correspondería exclusivamente a mí...»

Lana Drown.